Medio ambiente y fertilidad

Medio ambiente y fertilidad

Todos los 22 de abril –a partir de una resolución de la Organización Mundial de la Salud- se celebra a nivel mundial el Día de la Tierra.

En este día en particular se pretende reconocer la responsabilidad que nos corresponde de promover la armonía con la naturaleza y la Tierra a fin de alcanzar un justo equilibrio entre las necesidades económicas, sociales y ambientales de las generaciones presentes y futuras. En ese contexto, creo que hablar de contaminación ambiental y fertilidad es relevante.

Si bien en algunas ocasiones el contacto con un medioambiente tóxico es inevitable, ya sea por el lugar de residencia o por aquellas sustancias químicas presentes en el hogar, en el trabajo o en el medio de transporte, es importante saber que crece la cantidad de estudios científicos que estudian cómo las distintas formas de contaminación inciden sobre la fertilidad. La evidencia establece una relación directa entre la disminución de la calidad de los óvulos y del semen con la exposición a contaminantes.
Incluso la ingesta de productos con toxinas puede provocar desarreglos hormonales, modificación de la calidad ovocitaria y seminal, además de la receptividad del útero y afectar las trompas de Falopio o los testículos.
Miles y miles de personas que viven expuestas a niveles normales de toxicidad pueden lograr el embarazo naturalmente, lo recomendable es intentar evitar aquellas situaciones de exposición que pueden obviarse: la proximidad a sitios con niveles elevados de tóxicos. De todas formas, es relevante informar que si bien cualquier exposición a contaminantes puede ser perjudicial, aún cuando deba convivirse con ellos, lo importante es evitar una exposición sostenida o a altos niveles de tóxicos.
Además, no sólo debemos pensar en los tóxicos que nos afectan desde afuera sino también aquellos que nosotros mismos ingresamos al cuerpo como el humo del cigarrillo –tan dañino para el sistema reproductivo como para la salud en general- o incluso aquellas sustancias químicas que nuestro cuerpo genera en respuesta a situaciones de estrés.
Trabajar sobre todos estos puntos es importante para vivir mejor y aumentar las posibilidades de embarazo.

Dr. R. Sergio Pasqualini

Comentarios cerrados