La lucha que Milva Castellini le ganó a la endometriosis.
Milva Castellini como tantas otras mujeres, debió recorrer un camino – a veces largo, a veces arduo- para cumplir su sueño de ser mamá. Hoy relata su historia y, con un mensaje emotivo, incita a otras parejas y mujeres a no bajar los brazos. Esta es la historia que trajo a Martiniano hasta sus brazos.
“Llegué a Halitus porque me dijeron que era el mejor lugar para ir. Ya habíamos tratado de pelear contra la endometriosis, con operaciones, todavía no habíamos probado con tratamientos. En ese momento me atendía con otro equipo médico que me acompañó hasta el final hasta que me dijeron ‘Bueno, hasta acá llegamos nosotros. Ahora, buscá otro camino que tenga que ver con alguien que sepa mucho sobre cómo ayudarte a tener un bebé’, lo que me pareció de una gran honestidad. Y llegué a Halitus. Mi búsqueda empezó más o menos con 35 años”, comienza su relato emocionada.
El Dr. Sergio Pasqualini, Presidente y Fundador de Fundación Repro, Director científico de Halitus Instituto Médico y su guía en este camino, explica el caso de Milva y Sebastián: “La endometriosis, como muchas veces hablamos, el 40% de las mujeres que buscan embarazos algún grado tienen. Lo que pasa es que Milva tenía un grado 4, se le hizo incluso un diagnóstico de endometriosis vesical. Es decir, es una situación poco frecuente dentro de las endometriosis que son frecuentes, e inclusive en muchos casos no molesta para que venga el embarazo. Además en el caso de Milva, iba acompañada de numerosos quistes en los ovarios. En los casos de una mujer que busca embarazo hay que pensar muy bien qué hacer porque si se realiza la cirugía para sacar los quistes, el tejido ovárico disminuye y reduce las posibilidades y hay que saber que si los punzamos, los quistes se vuelven a formar. En este caso, con Milva de 35 años, con análisis hormonales normales desde el punto de vista reproductivo, confirmamos que ovulaba normalmente. Con lo cual, sin estimular con hormonas para no estimular la endometriosis, empezamos a seguirla en un ciclo natural o con una pastilla de Clomifeno. Así logramos 4 óvulos, fertilizaron dos y transferimos dos embriones muy lindos de aspecto. Y creo que en este caso influyó mucho todo el tratamiento complementario que hizo Milva en el instituto para tratar de acompañar y es aún más importante en estos casos en que trabajamos más naturalmente y no tanto con los esquemas de estimulación convencional que manejamos en la mayor parte de los casos”.
LA IMPORTANCIA DEL BIENESTAR EMOCIONAL Y ESPIRITUAL EN LA INFERTILIDAD
Uno de los elementos que la ayudaron en su camino hasta Martiniano, Milva reconoce, son las actividades del departamento Mente – Cuerpo de Halitus, específicamente el llamado Sistema de entrenamiento especial (SEES), cuyo objetivo es movilizar los recursos propios, aquellos que tiene el cuerpo para funcionar en plenitud. “Al principio Pasqua me decía que fuera al SEES, Sistema de entrenamiento especial, que estaba muy bueno y me daba un poco de fiaca pero empecé a ir y hoy estoy convencida de que fue clave. Realmente me pareció fascinante. Me ayudó a sentirme anímicamente de otra manera, a estar mejor. Estaban Claudia Pagano y María Elena Sardone (a cargo del SEES), quienes nos ayudaban mucho a relajarnos. Primero, bailábamos, algo que al principio parecía raro pero después uno se relajaba y se soltaba y cuando terminábamos la actividad era una sensación de bienestar lo que al principio te parecía una ridiculez. Y eso continuaba con un rato de meditación con alguna lectura que nos hacían las chicas, después venía la respiración en colchoneta. Pero sobre todo no era una terapia de grupo, no era que nos juntábamos todas a llorar y a hablar de lo que nos estaba pasando y que nos tenía a todas muy tristes, afectadas y hermanadas…no se habla de eso, al contrario, tenía que ver con pautas generales que te hacen bien para todo porque yo lo sigo usando al día de hoy. Yo siempre digo que sirve para la vida. Y haciendo el SEES, empecé a sentirme mejor, a no sentir tanta angustia”
Y agrega: “Yo ya estaba obsesionada con el tema. Y el último tratamiento lo pudimos llevar mejor porque pasó esto: empecé a volver a vivir porque había un momento en que la cabeza estaba ocupada por la búsqueda de un bebé y nada más, empecé a salir, a trabajar, a viajar, a juntarnos con amigos. Obviamente, los momentos clave son difíciles. De hecho, la noche anterior a la beta positiva yo lloré toda la noche convencida de que venía el quinto ‘No’. Y Sebastián, no. A él se le ocurrió filmarnos para sumar, para acompañar a tanta gente que le pasa lo mismo que a nosotros. Lástima que no empezamos a filmar antes y grabar los “no”.
EL EMBARAZO Y EL PARTO DE MILVA CASTELLINI
Milva describe el embarazo y el parto con energía y emoción: “Fue tan lindo estar embarazada, lo disfruté tanto. Tuve un embarazo espléndido. Durante todo el tiempo que duró el embarazo yo vivía conectada con mi hijo. Me sentí muy bien, mi mejor estado. El parto fue maravilloso, fue cesárea. Yo le dije a Agustín (Pasqualini) mentira que me operaste…Eso que te dicen que la cesárea es dolorosa…mi recuperación fue espléndida, no tuve un dolor, ni una puntada, nada. Y fue un momento de mucho placer. Había entrado a quirófano tantas veces con diagnósticos tan fuleros que no tenía ningún nervio de entrar a la sala de operaciones y era un re- plan entrar por una cesárea. Yo estaba feliz”.
“Yo estuve toda la cesárea sumamente lúcida. Y en el momento en que escuché ‘Ya viene, ya viene’, bajan el campo quirúrgico y Agustín Pasqualini me lo muestra a Martiniano…no tengo palabras para contar ese momento y cuando miro atrás, desde atrás veo a Pasqualini que sacaba las fotos! Todo en una misma línea: Martiniano, Agustín Pasqualini y el Dr. Sergio Pasqualini. No lo podía creer. ¡El me había asegurado que iba a estar conmigo y fue y dedicó el sábado a la mañana a sacar las fotos más importantes de mi vida y a acompañarme!”, relata entre aún sorprendida, agradecida y divertida, Milva Castellini.
Cuando piensa en aquellas parejas que, como ella, aún transitan las búsqueda del sueño de ser padres, sólo tiene un mensaje esperanzador: “Estoy feliz..si la vida te mostrase dos o tres años adelante que hoy iba a estar acá hablando en un día de la madre, cuando estábamos con tanta angustia.…Quiero decirles a quienes están buscando que no es un camino fácil pero que vale la pena recorrerlo, yo lo volvería hacer entero. Que busquen contención, yo creo que hay muchos profesionales en Argentina que trabajan muy bien, en lo personal cuando me lo preguntan, creo que estar en manos de Dr. Sergio Pasqualini y de su equipo es lo mejor que te puede suceder porque no sólo te contienen desde lo médico sino que hay una contención afectiva y humana enorme, Halitus tiene una calidad humana enorme. Y no tengo más que agradecimiento para todo el equipo que él formó, entero, desde la recepcionista hasta la persona de administración. Que sigan adelante, que busquen buena gente para hacer esto y que se contengan mucho espiritualmente que es muy importante”.
Y para cerrar, el Dr. Sergio Pasqualini agrega: “Es importante también resaltar que podamos trabajar. Porque cuando hay algún fracaso, y nos dejan seguir, eso suma. Y toda la parte complementaria de nuestro departamento Mente- Cuerpo es importante porque puede ayudar al resultado”.
Fuente: Sentirypensar.com.ar